


El museo de la Alcogida, situado hacia el centro de la isla canaria de Fuerteventura, en el municipio de Tefia, recrea una aldea tradicional de la zona. Es un túnel del tiempo y, para muchos, puede ser un reencuentro con el ambiente y los aperos, cacharros, ornamentos y útiles que hemos visto en las casas de nuestras abuelas.




El museo tiene empleadas a gentes de la zona que acuden cada día a trabajar en el museo, pero a trabajar como se trabajaba en tiempos remotos: así, hay un cantero, una tejedora, un carpintero... Y no sólo muestran cómo se trabajaba, sino que uno puede ver cómo vestían aquéllas gentes, puede tocar esos trabajos y conversar acerca de lo que hacen.



No faltan los animales de granja: burros, vacas, cabras y ovejas, gallinas... y un camello. Claro, es que esta isla es un recuerdo de que el Sáhara está cerca:

Una visita que merece la pena, desde luego, aunque sólo sea para ver una puesta de sol así:
